Laura Montero Rodil

Nací el 29 de Agosto de 1975, en Madrid, donde viví hasta el año 2000. Mi primer contacto profesional con el vino fue a través de la Guía Campsa, en el equipo de María Isabel Mijares, donde trabajaba los veranos mientras terminaba mis estudios de Ingeniero Agrónomo. Los dos últimos años de la carrera, 5º y 6º, que ya estaba un poco cansada de tanta teoría y poco práctica, aproveché para hacer vendimias en hemisferio Norte y Sur, en Invierno en Chile (Portal del Alto y Viña Carmen (aquí tuve mi primer encuentro con la biodinámica), ambas en la zona del Maipo) y en verano en España (Montebaco (Ribera del Duero) y Alvaro Palacios (Priorato)). Fue Alvaro Palacios quien me empujó a tomar una de las mejores decisiones de mi vida, me dejó claro que si quería profundizar y empaparme del conocimiento del vino tenía que completar mis estudios en Francia, en Burdeos. Así que en el 2001, en cuanto terminé la vendimia en el Priorato, y ya con el título de Ingeniera en mi mano, me fui a hacer mis primeras prácticas en Francia, en Cotes de Castillon.

En Septiembre de 2002, con la ayuda de una beca que me concedió la Fundación Alonso Martín Escudero, empecé dos formaciones anuales en la facultad de enología de Burdeos, un Master - D.E A (Diplôme d’Etudes Approfondies) en viticultura y enología y al mismo tiempo hacía el DUAD, un diploma universitario de aptitud a la degustación. Fue un año muy intenso, donde tuve la suerte de estar en contacto con todos los nombres que salían en el “tratado de enología” que tenia como libro de lectura cada día, Denis Dubourdieu, Aline Lonvaud, Yves Glories, … y allí entre tanto aprendizaje es donde conocí a Dominique … Me quedé en Francia hasta el año 2005 trabajando y aprendiendo en diferentes bodegas (con Denis Dubourdieu, a quien debo mucho de lo que sé, en Château Reynon y Clos Floridène y mas tarde trabajé en en Château la France).

En 2005 decidimos irnos a vivir a España. Empecé a trabajar como directora técnica en Clos D’Agon donde tuve la suerte de trabajar con Peter Sisseck. Fueron 3 años intensos, éramos un pequeño equipo y había que hacer de todo. Allí aprendí a moverme en todo lo que conlleva la vida real de una viña-bodega. Y todo con el único objetivo de hacer un gran vino. En 2008, tras un encuentro con Pepe Raventós, me uní como directora técnica al equipo de Raventós i Blanc, donde, además de aprender a trabajar con burbujas, nos lanzamos en la conversión total de la finca en ecológico y mas tarde en biodinámica.

En el año 2012 nos trasladamos a Galicia donde nos queríamos instalar definitivamente. Pasé de ser directora técnica al mundo de la consultoría lo que nos permitió a Dominique y a mí trabajar juntos en algunos proyectos. Tenemos la enorme suerte de compartir la misma pasión por la expresión de esos maravillosos “terroirs” repartido por todo nuestro país. ¡Vemos tantas joyas que están ahí!, esperando a que alguien se pare, las mire y les dedique el tiempo y atención necesarios.

Laura Montero Rodil

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